Durante los próximos días 26 a 29 de junio, la Asociación Española de Médicos de Baloncesto AEMB celebra sus XXIV JORNADAS en la ciudad de Valencia.
El deseo es reunir al máximo de profesionales del mundo de la salud que tengan relación con este apasionante deporte. Para ello, como ya en anteriores jornadas, hay ponencias enfocadas a aspectos no médicos, y sí fisioterápicos y de readaptación, de manera que se promueva el interés por otros profesionales sanitarios.
De igual manera, las comunicaciones orales dan paso a muchos profesionales que nos aportan novedades interesantes en todas las facetas de la salud en el baloncesto.
El enfoque de estas jornadas se ha llevado de forma predominante a “la lesión” y hemos reunido a profesionales expertos en cada área para que nos aproximen nuevas técnicas, nos aclaren decisiones terapéuticas, tanto en la élite como en el ámbito amateur o la escuela.
Pero si estas jornadas han de caracterizarse por algo, hay dos pilares esenciales que pueden ser el arranque de dos novedades importantes para el baloncesto en general. La primera, perseguida desde hace años por todos los médicos de esta asociación es la elaboración de un estudio epidemiológico de la lesión en el
baloncesto. Varios de nuestros compañeros van a embarcarnos en un estudio extenso, profundo y de calidad que en unos años nos va a aportar, con toda seguridad, datos novedosos de las lesiones de nuestros deportistas. El otro, en el que ponemos una ilusión personal, se centra en un baloncesto que, siendo
“familia”, está algo desatendido: el baloncesto en silla de ruedas. Tras las paralimpiadas de Londres 2012 parece que la llama paralímpica ha encendido muchas cosas, entre ellas una relación intensa con estos luchadores del baloncesto en silla de ruedas. El sábado 29, dedicado de una manera especial a ellos, va a ser un día diferente en estas jornadas.
Desde el Comité Organizador de las XXIV Jornadas de Médicos de Baloncesto, sólo nos queda invitaros a disfrutar del nivel científico de nuestras jornadas, del clima de esta maravillosa ciudad que es Valencia, de sus calles, sus monumentos, sus playas y su gastronomía.
El deseo es reunir al máximo de profesionales del mundo de la salud que tengan relación con este apasionante deporte. Para ello, como ya en anteriores jornadas, hay ponencias enfocadas a aspectos no médicos, y sí fisioterápicos y de readaptación, de manera que se promueva el interés por otros profesionales sanitarios.
De igual manera, las comunicaciones orales dan paso a muchos profesionales que nos aportan novedades interesantes en todas las facetas de la salud en el baloncesto.
El enfoque de estas jornadas se ha llevado de forma predominante a “la lesión” y hemos reunido a profesionales expertos en cada área para que nos aproximen nuevas técnicas, nos aclaren decisiones terapéuticas, tanto en la élite como en el ámbito amateur o la escuela.
Pero si estas jornadas han de caracterizarse por algo, hay dos pilares esenciales que pueden ser el arranque de dos novedades importantes para el baloncesto en general. La primera, perseguida desde hace años por todos los médicos de esta asociación es la elaboración de un estudio epidemiológico de la lesión en el
baloncesto. Varios de nuestros compañeros van a embarcarnos en un estudio extenso, profundo y de calidad que en unos años nos va a aportar, con toda seguridad, datos novedosos de las lesiones de nuestros deportistas. El otro, en el que ponemos una ilusión personal, se centra en un baloncesto que, siendo
“familia”, está algo desatendido: el baloncesto en silla de ruedas. Tras las paralimpiadas de Londres 2012 parece que la llama paralímpica ha encendido muchas cosas, entre ellas una relación intensa con estos luchadores del baloncesto en silla de ruedas. El sábado 29, dedicado de una manera especial a ellos, va a ser un día diferente en estas jornadas.
Desde el Comité Organizador de las XXIV Jornadas de Médicos de Baloncesto, sólo nos queda invitaros a disfrutar del nivel científico de nuestras jornadas, del clima de esta maravillosa ciudad que es Valencia, de sus calles, sus monumentos, sus playas y su gastronomía.
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